Trombosis Venosa Retiniana
La trombosis venosa retiniana es la segunda causa de disminución de visión entre las enfermedades vasculares. Es más frecuente en personas mayores de 55 años aunque puede suceder en más jóvenes. La trombosis puede ser de la vena central de la retina (OVCR) o de alguna de sus ramas (ORVR).
Se produce trombosis venosa de la retina cuando se ocluye alguna vena de la retina y la sangre no puede pasar por su interior. Se produce una ingurgitación venosa y posterior ruptura de los capilares en el territorio dependiente de esa vena provocando sangrado intraretiniano en el territorio afectado.
Por qué sucede una trombosis venosa retiniana?
Las obstrucciones de las venas de la retina están causadas en la mayoría de los casos por la compresión que ejercen las arterias endurecidas (arteroesclerosis) sobre las venas en las zonas donde se cruzan entre ellas.
Entre los factores de riesgo encontramos:
- Hipertensión arterial
- Hiperlipidemias
- Diabetes Mellitus
- Fumar
- Obesidad
- Alteraciones hematológicas
- Glaucoma
- Enfermedades inflamatorias oculares
Que síntomas ocasiona?
El principal síntoma es la pérdida no dolorosa de la visión que puede ser grave en los casos de vena central de la retina y moderada en las obstrucciones de rama venosa y esto es ocasionado por el edema macular que es la inflamación de la macula secundaria a la trombosis venosa retiniana. En general, es unilateral pero en algunos casos puede ser bilateral.
En los casos de trombosis de vena central de la retina isquémica (no perfusión sanguínea del gran parte del tejido retiniano) el pronóstico visual es reservado e incluso puede no recuperarse la visión a pesar de tratamiento.
Como se hace el diagnóstico?
Tu médico oftalmólogo/a te realizará una evaluación completa incluyendo el estudio de fondo de ojo bajo dilatación pupilar y confimará el diagnóstico de trombosis venosa retiniana según los hallazgos clínicos.
Que estudios complementarios se pueden realizar?
Generalmente se solicitan estudios complementarios de retina, los cuales son:
- Tomografía de coherencia óptica ( OCT): evalúa las capas de la retina en el área macular confirmando la presencia de edema macular.
- Angiografía de Fluoresceína: (RFG) determina la extensión de la zona no perfundida. Además confirma la aparición de neovasos si los hubiera en las formas isquémicas.
Cuales son las posibles complicaciones?
Las posibles complicaciones que ponen en peligro la visión son el edema macular y la neovascularización (vasos anómalos que crecen por la falta de perfusión) lo cual puede ocasionar hemorragia vítrea, glaucoma neovascular y en algunos casos desprendimiento de retina.
Cual es el tratamiento?
Es importante identificar los factores de riesgo modificables y en algunos casos puede derivarte a un médico clínico, cardiológo o hematólogo.
Los tratamiento generalmente indicados son:
- Inyección intraocular de medicamentos antiangiogénicos (anti-VEGF)
- Inyección de un dispositivo de liberación intraocular de corticoide (Ozurdex®)
- Fotocoagulación con laser
- En casos de hemorragia vítrea que no se aclara o desprendimiento de retina puede ser necesario una cirugía (Vitrectomía posterior)
El tratamiento debe ser personalizado y el especialista decidirá el tratamiento, seguimiento y controles necesarios según cada caso.